martes, 24 de diciembre de 2013

La vida envuelta para regalo

Vine a regalarte estas letras,
palabras de gratitud algo cansadas,
pero no por eso menos ciertas.

Vengo a darte mi silencio de luna y caverna,
en estas manos que no son suaves, pero son tuyas.

Puedo darte, como cada año, dos niñas preciosas
que crecen más rápido de lo que tú y yo queremos,
que sin plan ni urgencia, nos superan en todo
uniéndonos  en yunta que lentamente avanza y prepara la tierra.

Te doy la calma de los años,
tiempo vivido entre paredes y jardines vestidos de cantos.
Envueltos en letras, pequeños momentos.

Imaginé este regalo más extenso
pero el tiempo me es esquivo,
solo alcanzo a darte el día a día de mi trabajo
las imperfecciones que te molestan de mí,
y este hogar que re-nace compartido.